La Costa del sol cuenta con 150 kilómetros de costa en el sur de la península, desde la Herradura en el extremo más oriental de la provincia de Málaga hasta Gibraltar en la frontera occidental, llenos de playas de todo tipo y para todos los gustos que hacen que sea un lugar paradisiaco.
Hace unos 50 años la gente con más nivel económico de toda Europa encontró en esta costa la perfecta combinación entre la belleza natural y el clima cálido, convirtiendo pequeños puertos pesqueros en centros turísticos de primer nivel, llenos de hoteles y casas de lujo. Las viviendas a lo largo de la Costa del Sol son un escaparate de arquitectura, desde el estilo Mediterráneo hasta casas ambientadas como en mediados de siglo en la era post-moderna. Y, por supuesto, no puede faltar la arquitectura de la Andalucía indígena con azoteas y adornos de terracota que componen el alma indígena de la región.
La zona de Marbella destaca por sus 25 kilómetros de playa acompañados de hoteles de lujo y los clubs de playa. En la zona de Torremolinos, sin embargo, podemos encontrar bares de tapas, chiringuitos, tiendas y heladerías más propias y tradicionales de esta zona. En Benalmádena, la ciudad antigua de casas blancas se mezcla con una zona portuaria más cosmopolita.